La soledad

Soledad no es sinónimo de estar sólo.
La soledad física tiene diversas soluciones, dependiendo de la actitud de la persona.
Se puede buscar a amigos, familiares, ir a un espectáculo o una fiesta donde se puede conocer gente nueva.
La verdadera soledad, la soledad profunda e interna es más dura y más difícil salir de ella.
No es una soledad que uno mismo elija a su antojo.
Es un estado de ánimo que se asemeja a la depresión y que, a diferencia de la soledad física, se siente igual de intensa , se esté acompañado o no.
Eso no significa que si detectamos este tipo de soledad en un amigo, debamos dejarlo solo. Al contrario. Aunque él no lo crea, nos necesita más que nunca, pero además va a necesitar ayuda profesional.
Hay que procurar que la persona afectada sienta que no estamos a su lado porque nos necesita, sino todo lo contrario, porque nosotros necesitamos a nuestro amigo de siempre.