El día gris



El día gris en que te conocí
era fresco y húmedo.
Y lo más placentero de aquel día
fuiste tú.
Siempre me han gustado los días grises.
Perfectos para permanecer acurrucados en casa.
Perfectos para pasear con un buen abrigo
por calles solitarias.
Pero el día gris en que te conocí
tuve una razón más.
Me habían enseñado muchas cosas
en la vida.
Pero nunca que se conoce a la mujer de tu vida
en un día gris.
A partir de entonces con un pensamiento mágico
propio de un niño,
cada día gris creí que algo grande iba a ocurrir en mi vida.

Comentarios

Entradas populares